Cambia, TODO cambia!

Y atreverse a ese cambio que está por venir, aunque sea todo un giro. El miedo de saber, de sentir, de crecer, de cambiar; ASUSTA. Y no por eso, tenés que estar mal. Sola no vas a estar nunca, y si así fuese, alguien cruzaría por tu vida.  Tus días siempre van a estar rodeados de personas, que van y vienen. Que se van, y no vuelven. Millones de personas, quizás, ya han pasado por tu vida, y solo de la mitad tenés recuerdo en tu memoria de mosquito. Un gigantesca parte de mi cabeza, piensa en PRESENTE. Una simple y diminuta división acepta el pasado sabiendo que es lo que me llevo a ser como soy hoy. Pero en el futuro, se juega mucho con la imaginación, arriesgándose a perder mil ilusiones. El futuro es un suelo que cambia, como cambiamos nosotros. Sumado al miedo de equivocarnos o no ser lo que esperamos. Para mirarse al espejo, hay que serse sincero. Si ves lo que te gusta, entonces prémiate. Felicítate. Sonríete. Ámate. Sos vos, y nadie te va a sacar ese ‘vos’ que lograste, que sos y que siempre vas a ser. Es tu esencia. Cuando ya no te guste lo que ves, entonces es hora de preguntarte ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Y en qué parte del camino CAMBIASTE?

Sofía Romano